"Un escritor nunca olvida la primera vez que acepta unas monedas o un elogio a cambio de una historia. Nunca olvida la primera vez que siente el dulce veneno de la vanidad en la sangre y cree que, si consigue que nadie descubra su falta de talento, el sueño de la literatura será capaz de poner techo sobre su cabeza, un plato caliente al final del día y lo que más anhela: su nombre impreso en un miserable pedazo de papel que seguramente vivirá más que el. El escritor está condenado a recordar ese momento, porque para entonces ya está perdido y su alma tiene precio". El juego del Ángel. Carlos Ruiz Zafón
Subí al cielo y toqué con la punta de mis dedos el paraíso y un torrente de realidad me hizo morder el suelo de nuevo. Una realidad cruel e insensible que no supo que hacía con mi alma. No sabia que nunca más creería en esas cosas que la gente sueña,desde entonces. La vida jugó con ella y el juego acabó con ella misma. Ahora es un ente que vaga sin rumbo , un alma solitaria que en el mundo de los vivos ya no siente.Lo ha perdido todo, ha perdido el sentido, la dirección, por perder ha perdido hasta la inspiración. Y ya no hay forma de recuperar el tiempo perdido porque se ha perdido a si misma.
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